En tu hora de relax diaria los sonidos de la naturaleza tienen la capacidad de devolvernos nuestro centro, nos recuerdan quiénes somos y de dónde venimos, nos recuerdan que formamos parte de la naturaleza, de la vida en su expresión máxima de creación.
En tu hora de relax diaria deja que el viento susurre en tus oídos, calme tu mente y tus pensamientos, ordene tus ideas y te permita decidir con claridad. Deja que un fuerte viento torrencial arrastre tus pensamientos tortuosos para que la brisa suave pueda llenar tu mente de pensamientos pacíficos, claros, ordenados y serenos.
También, en tu hora de relax diaria permite que las suaves ondas del agua viajen hasta tu corazón y limpien las emociones más escondidas, permite que remuevan el llanto y la nostalgia. Permite que la fuerza de las mareas y los ríos embravecidos inunden tu corazón de la fortaleza y la alegría del amor.
Ancla tus pies firmemente en la tierra húmeda y fértil, siente su fuerza vital inundando tus venas, corriendo por tu cuerpo, siente el poder de estar vivo, siente la magia de la creatividad, siente la seguridad y la protección de la madre tierra.
Insufla en tu espíritu la vitalidad y la energía del fuego, el calor y la luz del sol, la fuerza de las llamas que queman y transmutan lo viejo para renacer con fuerza y energías renovadas. Llena tu espíritu de vitalidad, alegría, ilusión y pasión por estar vivo.
Por tu bienestar,
Rafa Monllor